Desde las 21.30, la orquesta de jóvenes fusionará su música junto al violinista Pablo Agri, en un espectáculo que titularon "De tal palo tal astilla". Sonarán Tchaicovsky, Vivaldi, Troilo, Gardel y Antonio Agri.
Descontracturadas, sueltas, con la frescura que imprime la adolescencia, Melanie Gutiérrez (16) y Alma Martínez (13) integran el grupo de alumnas más avanzadas de Amadeus, la orquesta juvenil de Mar del Plata que esta noche volverá a presentarse en el Teatro Auditorium. A las 21.30 tocarán junto a un invitado de lujo: el violinista Pablo Agri, hijo de Antonio Agri, quien fue miembro estable de la orquesta de Piazzolla y llega desde Buenos Aires.
Para sellar ese espíritu joven que tiene el colectivo musical, integrantes, docentes y el mismo fundador de Amadeus, Guillermo Sotelo, eligieron un repertorio mixto, compuesto por obras de Tchaicovsky, Vivaldi, Troilo, Gardel y de Antonio Agri.
“El repertorio que elegimos va surgiendo, depende de lo que nos va gustando, es difícil Tchaicovsky, no sabés lo difícil que es y lo gratificante que es cuando sale”, apunta Melanie, quien asiste a la orquesta desde hace tres años y tiene decidido dedicarse a la música en su vida profesional.
“¿Qué tienen en común Tchaicovsky con el tango?”, repite Sotelo. “Y -responde-, el tango es una música de inspiración romántica y Tchaicovsky es romántico. Está esa conexión y además, vamos a tocar Serenata para cuerdas, una de las más importantes de toda su obra”.
“Vivaldi es muy divertido para tocar”, sigue Melanie. “Lo pueden tocar los medianos, los chiquitos, pero no es tan fácil, tiene momentos”.
La elección de Vivaldi apareció para dejar conformes a los chicos y chicas de la orquesta que se deleitan con esa música. “Es que Vivaldi es el rock del violín”, ríe Sotelo, quien contó que Amadeus está dividida en tres grupos: los integrantes más avanzados, los de nivel medio y los que recién se incorporan a los talleres y ensayos, que se realizan en El Club del Teatro (Rivadavia 3422). Esta noche, los protagonistas serán los chicos y las chicas de estudios avanzados y los del nivel medio.
Debido a que prepararon el concierto con Agri, los músicos ensayaron a todo vapor cuatro horas por día, incluso los domingos. Alma se sincera: “Hay que poner mucho de uno, poner mucho esfuerzo, horas y horas”.
La joven de 13, que también hace tres años que es parte de Amadeus, logró engancharse con la orquesta a partir de “la buena onda” que encontró. “Mi papá toca la guitarra y canta, yo vengo de una rama artística. Le dije a mi papá que quería estudiar violín y me llevó a la orquesta y empecé a tocar, pero la música clásica no me llamaba la atención, no sabía qué era, yo entonces escuchaba folklore, Abel Pintos y otros. Y cuando empecé me enganché por la buena onda que encontré”, recuerda Alma.
A Melanie no le gustaba el violín. “Me parecía aburrido, fui al Polivalente de Arte pero no había más cupo y empezaba la campaña para anotarse en Amadeus. Fui y me encantó la onda de los profesores y me enganché”, cuenta y dice que piensa emigrar de Mar del Plata para seguir estudiando el instrumento.
Músico con trayectoria
Por su parte, Agri fue ganador del Premio Clarín Espectáculos como Revelación en el año 2006 y fue nominado a los premios Gardel por “Agri X 2”, un disco que había grabado junto a su padre, Antonio Agri, con la Orquesta Sinfónica de Letonia y la dirección del Maestro Pedro I. Calderón. A su vez, ha lanzado “Cuadros Tangueros” con su sexteto de cuerdas y en 2002 presentó “Prepárense”, en trío junto a Cristian Zárate y Daniel Falasca, que fue elegido como “Mejor Album de Tango” por el Diario La Nación.
Fue seleccionado por Juventudes Musicales para formar parte de la Orquesta Juvenil Mundial en Suecia y Alemania. Ese mismo año fue becario de la Camerata Bariloche estudiando música de cámara con sus solistas: Elías Khayat, Andrés Spiller y Thomas Tichauer.
Tiempo después, fue becado por la Fundación Antorchas para estudiar en el Conservatorio Edgard Varese, en Francia, con el maestro Ami Flammer, obteniendo el Premier Prix en julio de 1997.
Por otra parte, durante sus más de 20 años de carrera profesional tocó con los principales músicos de tango: Mariano Mores, Néstor Marconi, Horacio Salgán, Julián Plaza, Osvaldo Berlingieri y Juan José Mosalini, entre otros.